Alimentar al mundo

Alimentar al mundo

Si pudiera cambiar algo del mundo, cambiaría el hambre en el mundo, porque nadie merece pasar hambre y todo el mundo debería tener siempre algo que comer. Los niños merecen comer para hacerse grandes y fuertes. Cerca del diez por ciento del mundo no tiene qué comer, es decir, 828 millones de personas. Es un problema que hay que resolver. Es una de las necesidades más básicas para la vida humana y no debería ser un problema. Se desperdicia y se tira mucha comida que podría ir a personas hambrientas de todo el mundo. Por ejemplo, en Dunkin Donuts se tiran cientos de donuts cada noche. Tenemos que limitar el desperdicio de alimentos por parte de empresas, hogares y particulares. Tenemos que pensar en nuestras acciones y en el daño que hacemos a la gente cuando tiramos comida. Tenemos que unirnos todos, esto no se puede hacer solo. El cambio comienza con el trabajo conjunto de todos y cada uno de nosotros. Empieza poco a poco e intenta reducir el desperdicio de alimentos todos los días. Luego puedes ir más allá e intentar influir en tu comunidad organizando eventos para recaudar fondos e instalando cubos de compostaje en tu comunidad para evitar que se desperdicie tanta comida. Es comida que podría ser rescatada y utilizada como fertilizante para ayudar a alimentar a más personas que pasan hambre todos los días. Después de ayudar a tu comunidad, puedes trabajar para ayudar al mundo haciendo una campaña en las redes sociales para concienciar o donando o creando tu propia organización benéfica que ayude a alimentar a la gente. Lugares como feeding America ayudan a alimentar a quienes pasan hambre y aceptan voluntarios. Yo he sido voluntaria en mi iglesia y he empaquetado cajas de comida que se envían a quienes las necesitan. Es fácil de hacer y te sientes mejor persona después de hacerlo. Imagínate cuántas personas luchan por mantener a sus familias. Piensa en cómo te sentirías tú en esa situación, ¿no quieres ayudar a la gente a vivir una vida más feliz? Tú puedes hacerlo. Sólo tienes que poner un poco de tu parte. Si todo el mundo pone un poco de su parte podemos acabar cambiando el mundo, pero tenemos que hacerlo juntos. El hambre en el mundo es algo que tiene que cambiar y creo que podemos hacerlo.

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