El Tribunal Supremo estudiará un caso sobre la píldora abortiva
El Tribunal Supremo indicó el 13 de diciembre que estudiará un caso cuyo resultado podría hacer menos accesible la píldora abortiva.
En su mayor movimiento relacionado con el aborto desde la anulación del caso Roe contra Wade, el Tribunal Supremo se ocupará de un caso relacionado con la disponibilidad de la mifepristona, un componente clave de la píldora abortiva, informó NBC News. El tribunal estudiará las apelaciones en defensa de las medidas adoptadas por la FDA en los últimos años para facilitar el acceso a la mifepristona, incluida una decisión de 2021 para hacerla disponible por correo.
Según NPR, el caso se originó con la sentencia de abril del juez de distrito antiabortista estadounidense Matthew Kacsmaryk, que pretendía instituir una prohibición nacional de la mifepristona. El juez dictaminó que la FDA había aprobado indebidamente el fármaco en septiembre de 2000, después de que médicos y grupos encabezados por la Alianza para la Medicina Hipocrática presentaran una demanda impugnando la decisión de la FDA, según CBS News. Históricamente, la FDA, y no el sistema judicial, tiene autoridad para aprobar o denegar la comercialización de fármacos. El juez de distrito estadounidense Thomas O. Rice dictó inmediatamente una sentencia contraria, y la decisión fue posteriormente suspendida por el Tribunal Supremo, lo que permitió que la mifepristona siguiera utilizándose.
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El caso original dio lugar a una serie de sentencias de tribunales inferiores y apelaciones de la administración Biden y del fabricante de mifepristona Danco Laboratories. El Tribunal Supremo declinó ocuparse de la impugnación de la aprobación inicial del fármaco por parte de la FDA, pero NBC News informó de que se pronunciará sobre decisiones posteriores que facilitaron el acceso al medicamento. En 2016, la FDA amplió de siete a diez semanas el plazo en el que podía utilizarse la mifepristona para interrumpir el embarazo. En 2021, a raíz de la pandemia, la FDA flexibilizó las normas sobre su administración para permitir su distribución por correo.
Si la mifepristona se volviera menos accesible en el futuro, significaría que el aborto podría ser aún más difícil de acceder para muchas personas en todo el país que viven en estados que han prohibido o restringido fuertemente el aborto. Incluso para las personas que viven en estados donde el aborto está disponible, las mayores restricciones en la administración de mifepristona podrían crear una mayor necesidad de visitas médicas en persona y otras barreras que pueden hacer que el aborto sea menos accesible.
Mini Timmaraju, presidenta y directora ejecutiva de Reproductive Freedom for All, declaró: "Este caso nunca debería haber llegado tan lejos. Los caprichos de jueces extremistas no deberían anular dos décadas de ciencia asentada y uso seguro. Los jueces conservadores del Tribunal ya han puesto fin a Roe contra Wade, y ahora están poniendo en peligro el acceso al aborto farmacológico para más de 64,5 millones de personas, incluso en los estados donde el aborto está protegido. Esto es un incendio de cinco alarmas, y todos deberíamos estar en alerta máxima. Para preservar cualquier último resquicio de su legitimidad, el Tribunal debe fallar en contra del falso caso de los extremistas antiabortistas."
El aborto farmacológico representa más de la mitad de todos los abortos, según una investigación del Guttmacher Institute.
