¿Están los adolescentes arruinando la subcultura alternativa?

¿Ha reducido el movimiento alternativo a una mera estética el auge de las redes sociales, dirigidas específicamente a los miembros de la Generación Z? En un mundo de ignorancia, tendencias y moda rápida, el movimiento alternativo se ha convertido en una idea contradictoria. ¿De cuánto de esto son realmente responsables los adolescentes? Aunque es cierto que hay adolescentes que comprenden y respetan la ideología del movimiento, la mayoría de los jóvenes carecen de la misma comprensión. Sin saber realmente lo que significa ser verdaderamente alternativo, ¿arruinarán los adolescentes la subcultura?

¿Qué significa ser alternativo?

El término "alternativo" engloba a todas las subculturas que existen al margen de la sociedad y la cultura popular. Esto incluye, entre otros, el gótico, el punk, etc. Desde el nacimiento del punk en los años 60, el estilo de vida alternativo se ha asociado con la ideología, la moda, la política y la música. Muchos artistas musicales alternativos tratan temas y puntos de vista políticos que la cultura dominante tiende a ignorar, como el álbum OK Computer de Radiohead, que aborda el hecho de que nuestro mundo está "plagado de consumismo desenfrenado, alienación social, aislamiento emocional y malestar político" Los principales pilares de la ideología alternativa son el anticonformismo, la contracultura y el anticonsumismo.

El auge de la "estética" alternativa

Desde el cambio de siglo, la idea de "estética" ha ganado popularidad en las redes sociales. La estética, que antaño se utilizaba en un sentido filosófico para describir el estudio de la belleza y el gusto, puede describirse ahora con esta impecable explicación del diccionario urbano, que define el término como "una palabra típicamente utilizada por los adolescentes para decir que algo parece guay y digno de hashtag".

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Ser alternativo no es algo en lo que puedas convertirte simplemente porque te guste el look de eyeliner y medias de rejilla. Ser alternativo implica realmente pertenecer a una ideología alternativa. Cuando sólo se valora la apariencia externa de esta escena, disminuyen las creencias del movimiento. En esencia, si uno se alía con la cultura dominante, identificarse con una estética alternativa degrada la subcultura alternativa a un simple filtro.

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Etiquetado y categorización excesiva

Cuando un adolescente dice "soy tan Emo" o "soy alternativo", revela que en realidad no lo es. La idea moderna de etiquetar a las personas en función de su estética, sexualidad, identidad de género, etc., es una nueva forma de atrapar a la gente dentro de las ideas y normas sociales. Declararse alternativo no sólo es perjudicial para el movimiento, sino que utilizar un concepto dominante como el etiquetado para anunciarse como anticonformista degrada las ideas del movimiento.

El robo de Emo

El robo del Emo muestra otra subcultura que cae bajo el paraguas Alternativo, que ha sido corrompida por los adolescentes. Nacido del género musical hardcore punk que se originó en Washington D.C. a mediados de los 80, el Emo supuestamente experimentó un resurgimiento durante la COVID-19, pero en realidad ha sido completamente destruido. En su verdadera forma, el Emo se ha asociado con el arte poético, expresivo y emocional, así como con la alienación social general y el enfado con la sociedad. Ahora, el término "Emo" se utiliza para describir a un grupo de compradores habituales de Hot Topic que creen que escuchar a My Chemical Romance es un rasgo de su personalidad. Sabes que el verdadero Emo ha muerto cuando lees el titular hueco "12 conjuntos Emo que abrazan a tu chica Tumblr interior de 2010" de la revista Seventeen. Ese titular demuestra que la subcultura Emo se ha degradado a una estética y el artículo en sí es lo absolutamente opuesto al verdadero Emo. Empezando con "si hemos aprendido algo del resurgimiento del twee, la longevidad del gorpcore", el artículo ya pone de manifiesto sin querer la absoluta estupidez de la estética y la jerga Gen Z. Si no lo supiera, asumiría que Twee y Gorpcore son los nombres de diferentes especies alienígenas. Más adelante, el artículo se apropia de la idea de que Emo es un estilo de moda y no un estilo de vida cuando dice que "En los días en los que todo es monótono... la moda Emo está aquí para ti" Para rematarlo, este autor limita la expresión de la moda Emo a "[r]ipped skinny jeans, heavy metal band tees, choker necklaces, knee high socks... and leather jackets" y refuerza la idea de que Emo se basa en la apariencia y no en la mentalidad.

La nueva "cara" del Emo, según la revista Seventeen

El anticonsumista

Una de las creencias fundamentales de la subcultura alternativa es el anticonsumismo, que implica no querer comprar moda rápida, buscar ropa de origen ético y no llenar los bolsillos de las grandes corporaciones. Por eso, el estilo alternativo se basaba en gran medida en ropa de segunda mano, comprada localmente y reutilizada. Ahora que el estilo alternativo se ha convertido en un fenómeno generalizado, estas creencias se han dejado de lado y la mayoría de los atuendos alternativos que se ven en las redes sociales están infestados de capitalismo. Las tiendas en línea que atienden a la juventud "alternativa", como DollsKill, Shein y Eloquii, se fabrican a bajo precio y sin ninguna consideración por el medio ambiente o los derechos de los trabajadores. Al producir en masa ropa que pretende emular el estilo de los "originales" se desvirtúa el propósito de llamar a la subcultura "Alternativa". Ahora otras empresas comercializan ropa llamándola "gótica" o "alt" aunque no tenga ningún parecido con el estilo real. Abajo he incluido un anuncio de Kohl's, que etiqueta un conjunto sin ninguna originalidad como "Gothcore" porque tenía piezas negras.

Al socavar una parte crucial de este movimiento y contradecir su creencia central para sacar provecho de la originalidad, la demanda de ropa estética está perjudicando a la subcultura.

Cuando Ron Bassilian, del Daily Bruin, dijo: "Las subculturas punk y alternativa se han empaquetado, mercantilizado y están listas para el consumo de masas", resumió con eficacia el problema de la Generación Z y su apego a la estética alternativa. Si uno recurre a una subcultura no conformista para ajustarse a la norma cultural, entonces el sentido de la contracultura ha sido derrotado. Ahora que ser "alternativo" se ha convertido en una idea omnipresente, se ha perdido la fuerza de ser alternativo.