Gente normal

Gente normal

"Entonces se reía de verdad. En la novela Gente normal, Sally Rooney describe lo cruda que puede ser una relación. La autenticidad de la relación entre Connel y Marianne es lo que atrae a los lectores. Creas o no en las almas gemelas, a lo largo de la novela queda claro que Marianne y Connell tienen una conexión difícil de conseguir. Los altibajos que se presentan a lo largo de la novela no son el resultado de una falta de amor, sino de la presencia de la naturaleza humana.

A lo largo de la novela, Connell lucha contra su bienestar mental. Sufre de ansiedad, y a menudo afecta a las cosas que hace. En el instituto, Connell se preocupaba a menudo por cómo le percibía la gente. Vomitó en el baño por el estrés que le producía mantener su relación en secreto. Marianne caía muy mal entre sus compañeros y Connell era popular. Quería a Marianne, pero le daba vergüenza que sus amigos se enteraran. La ansiedad social de Connell aumentó cuando fue a la universidad. Ya no era el jugador de fútbol popular al que todos adoraban sin esfuerzo. Connell se avergüenza de su personalidad, se considera aburrido. Le resulta imposible hablar con la gente y, lo que es peor, conectar con ellos. Esto le ocurre con todo el mundo excepto con Mariane. Marianne es la única persona con la que Connell siente que puede ser verdaderamente él mismo. Ella fue la primera persona que le hizo sentir que podía ser él mismo y eso fue suficiente. Por muy agotado mentalmente que esté Connell, Mariane es la única persona con la que siempre puede estar y sentirse él mismo. Más adelante en el libro, Connell entra en un profundo episodio depresivo tras la muerte de su amigo. A Connell le cuesta hacer cualquier cosa y empieza a acudir a un terapeuta. Aunque él y este amigo nunca tuvieron una conexión profunda, su muerte le impactó mucho. Esto se debe a que era una persona importante en la vida de Connell cuando sentía que pertenecía a algo. Connell nunca podrá volver a la vida que tuvo, y la muerte de su amigo se lo recuerda aún más. Cuando Connell ve a Mariane en el funeral, le da un abrazo que nunca antes le había dado. Esto se debe a que sabe que Marianne sabe exactamente por lo que está pasando. Connell y Marianne ven el mundo de la misma manera y esto le da un consuelo que va más allá de las palabras. Ambos conocen esta conexión sin tener que decirlo.

Marianne es una chica con una vida familiar problemática. Lucha internamente con lo que cree que se merece. Cree que no merece ser amada y a menudo sale con hombres inadecuados. Ha dejado que los hombres de su vida la traten con poco respeto porque está acostumbrada a ese trato. Su hermano abusa mental y físicamente de Marianne sin motivo. Marianne soporta estos abusos y cree que ella es la raíz de su ira. La madre de Marianne le hace creer que ella provoca la ira de su hermano con su inteligencia. El hermano de Marianne se siente inferior a ella porque es muy inteligente. Esto se ve en su relación con Jamie, ya que constantemente la hace sentir inferior a él, debido a sus celos. Cuando Connell le recuerda constantemente a Marianne lo maravillosa y asombrosa que cree que es, ella se lo toma como una sorpresa. Le cuesta creer que alguien pueda sentir algo así por ella. Connell dice continuamente que Marianne es la persona más inteligente que conoce y que la tiene en alta estima. Para él, Marianne es la mejor persona que conoce.

Sally Rooney hace un trabajo fenomenal captando la naturaleza humana que hace que la gente actúe como lo hace. Connell y Marianne son individuos imperfectos y ponen de relieve lo difícil que puede ser nuestra vida cotidiana y el peaje que conlleva. Marianne y Connell se tienen un amor genuino e incondicional, a pesar de sus defectos y errores.

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