Papa Oppong redefine la moda ghanesa con un giro moderno a los estilos tradicionales

Papa Oppong siempre supo que quería ser narrador. Este diseñador ghanés-estadounidense, que dibuja desde niño, se inspiró en la rica historia oral de Ghana que su abuela compartía con él durante su infancia. "Hay un diálogo en la ropa. Vuelve a África, vuelve a Ghana, vuelve a estos cuentos populares y folclores y hay una especie de objetos tangibles como la ropa, donde la gente puede sentir una conexión a través de estas historias".

Papa Oppong, diseñador de moda especializado en ropa femenina y licenciado en Diseño de Moda por el Fashion Institute of Technology, hace hincapié en "ideas, no diseños". Cuenta que su experiencia jugando con muñecas Barbie de niño influyó profundamente en su imaginación. "Barbie puede ser médico hoy y al día siguiente surfista. Y me dije: quiero ser como esta muñeca que puede ser cualquier cosa. Quiero poder transformarme".

A pesar de haber elegido intencionadamente su propio nombre para su marca por su pronunciación única, el enfoque de Oppong dista mucho de ser individualista. Al trabajar con un equipo de talento, el diseñador se toma su tiempo para nombrar a cada una de las personas que le ayudan a dar vida a sus visiones. "Sé lo que se me da bien y lo que no. Otra parte clave de mi proceso es que trabajo con profesionales, ya sea en Nueva York o en Ghana", afirma. "Mi proceso es muy tradicional. Hay una idea, un concepto al que quiero dar vida y un equipo de gente que me ayuda por el camino".

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Creció en Accra y más tarde emigró a Nueva York en su juventud, la herencia de Papa Oppong está cuidadosamente entretejida en cada pieza, pero él se mantiene firme en su misión de desafiar las percepciones convencionales. A pesar de las falsas percepciones de lo que es África y de las limitaciones impuestas a los diseñadores africanos, Oppong echa por tierra la idea de que honrar sus raíces debe consistir únicamente en resaltar los tejidos estampados tradicionales en sus prendas. "Lo hago con mucha intención, porque la moda africana es más que eso. El kente que estás viendo, aunque no sea amarillo, verde o rosa, sigue siendo un tejido kente y sigue siendo un tejido a mano de la región norte de Ghana".

La artesanía y la calidad priman en esta marca homónima. Al hablar de lujo, Oppong rechaza la idea de que el lujo sea lo que ha definido el mundo occidental. "La idea del lujo africano es muy diferente de lo que es el lujo occidental. Nadie va a vender un abrigo de visón en Ghana, aunque te lo puedas permitir, hace demasiado calor para llevarlo. Eso no significa que alguien en Ghana no pueda permitirse el lujo", afirma. "Pero, ¿qué significa el lujo cuando se piensa en una persona africana en un continente que es simplemente tropical por naturaleza? Son textiles queridos que se tejen a mano. Que alguien se tome su tiempo para hacer algo es un lujo. La artesanía es un lujo".

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En una época en la que la moda rápida domina el mercado y las páginas de exploración de cientos de miles de consumidores, Oppong se niega a adaptarse a esta "era del microondas", mientras cuenta con orgullo la intención que hay detrás de su ropa. "Asumo un gran riesgo, las piezas tardan hasta cuatro semanas en hacerse. Tengo que llamar a casa, mi madre tiene que comunicarse con alguien en la región norte de Ghana y me lo tienen que enseñar por teléfono", recuerda. "Es un proceso tan largo, pero me gusta tanto porque cuando ese vestido está completo, tantas manos lo han tocado".

El enfoque de Oppong está centrado en la comunidad y en la preservación y visibilidad, no sólo para él, sino para todos los diseñadores del continente. Cuando se le pregunta por el futuro de la moda africana y lo que desea para sí mismo y para otros diseñadores africanos de todo el mundo, Oppong eleva el tono con inmensa pasión: "Sólo espero que se nos den más oportunidades. Espero que se nos invite a más espacios en los que se hable de diseño", afirma con fiereza. "Tenemos que exigir y preguntar: '¿Por qué en el calendario de la Semana de la Costura no hay diseñadores que sean de África?".

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Con Ghana en su mente y en su corazón, el viaje de Oppong consiste en preservar la artesanía y honrar a quienes le precedieron. Su otra aspiración es sencilla: el diseñador de moda espera que algún día las historias de su legado se transmitan para que otros también las recuerden y reciten.