Por qué Laurence Fishburne apuesta por Angela Bassett para ganar el Oscar a la mejor actriz de reparto



	
		Por qué Laurence Fishburne apuesta por Angela Bassett para ganar el Oscar a la mejor actriz de reparto

Hace veintinueve años, Angela Bassett y Laurence Fishburne celebraban sus nominaciones al Oscar por encarnar a Tina Turner e Ike Turner en "What's Love Got to Do With It", de 1993. Este año, Bassett está nominada al Oscar a la mejor actriz de reparto por su imponente interpretación de la reina Ramonda en "Black Panther: Wakanda para siempre", y su colaboradora de siempre no podría estar más emocionada.

Llamando entre entrevistas para "John Wick: Capítulo 4", Fishburne dice: "Es de lo que está en mi corazón de lo que me gustaría hablar más que de lo que está en mi mente. Estoy muy, muy feliz por todos los elogios que le han llegado a Angela por esta actuación".

Fishburne vio "Wakanda para siempre" al principio de su estreno, interesado en ver qué le deparaba la secuela de Marvel.

"En primer lugar, se trata de una película protagonizada por cinco mujeres negras, lo cual es increíble. Y la forma en que Angela ocupó el espacio como reina fue impresionante. Su liderazgo en esta película es increíble y su generosidad, también, fue tan hermosa de ver".

Cuando la reina Ramonda de Bassett se lamenta por haber perdido a toda su familia ("¿No lo he dado todo?", grita), Fishburne se queda especialmente boquiabierto: "Es simplemente desgarrador y tan brillante".

Casualmente, fue el papel de Bassett junto a Fishburne en "Boyz n the Hood" (1991) el que sentó las bases de ese memorable monólogo. Durante el rodaje de la portada, el pasado noviembre, el director de "Wakanda para siempre", Ryan Coogler, le dijo a Bassett que la escena en la que ella y Fishburne discutían verbalmente sobre el cuidado de su hijo Tre (Cuba Gooding Jr.) le había quedado grabada después de todos estos años.

"Le pusiste en su sitio", dijo Coogler, resumiendo la secuencia. "Le dijiste: 'Las mamás han estado haciendo lo que tú has estado haciendo todo el tiempo, así que no te llevas ninguna galleta'".

Aunque Fishburne no guarda en la memoria recuerdos concretos de escenas de rodaje, sí recuerda la primera vez que vio actuar a Bassett.

"Estaba en la producción de Broadway de 'Joe Turner's Come and Gone', de August Wilson", recuerda Fishburne, "y me quedé absolutamente asombrado por su inteligencia y su fuerza, su belleza, su interpretación, es decir, por todo. Era el paquete completo. Verla en directo, si no la has visto nunca, es algo increíble".

Por supuesto, Fishburne acabó siendo testigo de ese talento desde la mayor proximidad posible, ya que los actores desarrollaron una duradera asociación en la pantalla y el escenario. Dos años después de "Boyz n the Hood" llegó "What's Love Got to Do with It"; luego, colaboraron dos veces en 2006, coprotagonizando "Akeelah and the Bee" en el cine y sobre el escenario en una producción de "Fences", de August Wilson, en el Pasadena Playhouse.

"No sé cómo explicarlo", dice Fishburne, considerando qué hace de Bassett una compañera de escena tan especial: "La palabra que la gente usa es 'química', que Angela y yo tenemos una química innegable e innata. Pero creo que realmente nace del hecho de que a las dos nos encanta lo que hacemos. Y cuando nos juntamos, nos damos espacio mutuamente para utilizar todas nuestras habilidades y talentos. Nos complementamos".

Los dos somos apasionados de nuestro oficio y tomamos decisiones que lo reflejan", añade Fishburne, "así que no es ninguna sorpresa que ella esté recibiendo la atención y los elogios que merece por su trabajo. Es un momento realmente hermoso".

El viernes, Bassett se sentó con la presentadora de "CBS This Morning" Gayle King para hablar de su carrera y reflexionó sobre lo que supuso ganar el Oscar hace 29 años: "Elijo creer que hay una razón por la que no ocurrió", dijo Bassett echando la vista atrás.

De hecho, a pesar de ofrecer una actuación realmente transformadora como Tina Turner, Bassett pasó 18 meses antes de conseguir su siguiente papel, con "Días extraños", "Vampiro en Brooklyn" y "Esperando a exhalar" siguiendo el período de sequía.

Cuando se le pregunta qué recuerda de aquella época, Fishburne dice: "Me alegré mucho de que nos nominaran, y hemos seguido carreras maravillosas. El tiempo no se detuvo. Obviamente, Angela no recibió el tipo de ofertas que uno esperaría después de conseguir una nominación al Oscar, pero eran otros tiempos."

Explica: "Todavía había, como usted dice, barreras que derribar. No había la variedad de papeles disponibles para las mujeres de color que hay ahora, en gran parte debido a la presencia de Angela en la pantalla."

La nominación de Bassett al Oscar a la mejor actriz de reparto ha traído consigo una reevaluación de su legado, que cuenta con un clásico tras otro. El público recuerda "Cómo Stella recuperó el ritmo", "Akeelah y la abeja" (protagonizada por una joven Keke Palmer) y su interpretación de una serie de figuras históricas, como Betty Shabazz (en "Malcolm X"), Katherine Jackson ("The Jacksons: An American Drama") y Rosa Parks ("The Rosa Parks Story").

A lo largo de los años, Fishburne ha observado el trabajo de Bassett como admirador y como amigo: "Angela es una actriz consumada. No hay nada que no pueda hacer", dice, mientras repasa su larga filmografía: "Una de mis favoritas es su interpretación de Marie Laveau en la serie 'American Horror Story'. 'Ruby's Bucket of Blood' también es muy divertida; lo hizo muy bien. Pero para mí, realmente, estoy ansioso por ver qué es lo próximo que hace".

¿Podría ser ese próximo proyecto otro reencuentro en pantalla? "Estoy seguro de que surgirán oportunidades para que volvamos a trabajar juntos", dice Fishburne. "Ojalá sea algo que nos apasione y entusiasme a los dos, y entonces lo haremos".

Mientras tanto, Fishburne verá los Oscar el 12 de marzo y animará a Bassett.

"Espero que gane. No voy a andarme con rodeos", dice, y suelta una carcajada: "Estoy emocionado y feliz por ella. Nadie se lo merece más".

Categorías:

Noticias relacionadas