Llega la era de los espacios híbridos de cotrabajo y bienestar

El Upper East Side de Nueva York es conocido por muchas cosas: mansiones, museos y "Gossip Girl", entre otras. Pero en la esquina de la 3ª Avenida con la calle 84 hay una especie de oasis chill, Sage + Sound, donde la gente se reúne para hacerse la manicura y pedicura en el estudio de manicura Sundays, un tratamiento facial de Biologique Recherche o participar en una clase de meditación.

También alberga la cafetería Isle of Us, que sirve comida sana y cafés con leche aromatizados con lavanda. Un día cualquiera, encontrarás a los clientes con sus portátiles entre cita y cita, disfrutando del ambiente tranquilo mientras evitan las cafeterías abarrotadas o sus oficinas.

Sage + Sound, que abrió sus puertas a finales de octubre, es uno de los nuevos espacios híbridos de bienestar y confraternización que han aparecido desde la pandemia. Y aunque el objetivo del negocio es ser una ventanilla única de servicios de belleza y bienestar, los astutos neoyorquinos no perdieron el tiempo y lo convirtieron en un improvisado espacio de cotrabajo.

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Ahora que muchos de nosotros trabajamos a distancia, buscamos algo más en los espacios de oficinas compartidas que una simple cerveza fría de barril. Para atraer a la gente fuera de casa, estos espacios de trabajo tienen que mejorar realmente su calidad de vida. Los espacios híbridos de trabajo y bienestar están apareciendo en ciudades de todo el país.

Aunque no es oficialmente un espacio de cotrabajo, otro lugar popular es The Well, situado junto a Union Square, en Nueva York. En un día laborable normal, el restaurante Kitchen & Table, que sirve platos de temporada como ensaladas, zumos y batidos, está lleno, con muchos clientes que celebran reuniones de trabajo informales o escriben en las mesas. Cuando acaban, algunos se dirigen a los salones o disfrutan de un masaje de pies o de un rato en la sauna. Las empresas también pueden organizar sus propios eventos reservando espacio en la "Biblioteca", una acogedora sala con cojines.

Por cierto, The Well está a tiro de piedra de lo que fue la ubicación original de Wing, la cadena de co-working para mujeres fundada por Audrey Gelman y Lauren Kassan en 2016. En agosto de este año, todos los locales de Wing cerraron sus puertas millennial-pink para siempre (aunque la empresa se había ido desangrando poco a poco desde 2020, entre COVID y las acusaciones de un ambiente de trabajo racista y tóxico).

En cierto modo, The Well parece estar aprendiendo de los errores de The Wing. Abrió originalmente en 2019 como un club exclusivo, solo para miembros, pero cuando volvió a abrir en abril de 2021, adoptó un enfoque más acogedor. Puede que los zumos verdes de 11 dólares y los tratamientos faciales de 205 dólares no sean exactamente accesibles o baratos, pero al abrir sus puertas a cualquiera que pase por la esquina (muy visible), ya es menos excluyente.

"The Well New York está realmente diseñado para ser una ventanilla única para el bienestar", dice Megan Mulholland, que se desempeña como VP de Marca y Marketing. "Los huéspedes vienen por una variedad de razones - ya sea para experimentar un masaje relajante, obtener un goteo de terapia intravenosa de vitaminas después de viajar, conseguir un masaje de pies con amigos después del trabajo, tomar una clase de Mindful Movement, o dejarse caer para una reunión de almuerzo en nuestra cafetería de bienestar."

Remedy Place, que se autodenomina "el primer club social de bienestar del mundo", abrió sus puertas en Los Ángeles hace tres años y abrió un local en Nueva York en septiembre.

Remedy Place ofrece la posibilidad de hacerse socio, pero también está abierto a todo el mundo, siempre que se reserve con antelación. Y aunque las ofertas de bienestar, como los baños de hielo y la acupuntura, son la atracción inicial, Leary afirma que la gente también acude a las reuniones, añadiendo o no experiencias de bienestar. El lugar se ha convertido incluso en destino de citas, con parejas que participan juntas en las modalidades.

El Equinox Hotel and Spa, ya inaugurado en el barrio neoyorquino de Hudson Yards, es también un destino popular tanto para los neoyorquinos como para los extranjeros. Además de un gimnasio Equinox, SoulCycle, saunas de barril y piscinas cubiertas y al aire libre, hay una amplia carta de spa con ofertas como tratamientos de drenaje linfático y el Gold Collagen Facial, creado en colaboración con la Dra. Lara Devgan.

Los huéspedes, por supuesto, aprovechan los servicios de bienestar del hotel, pero no son los únicos. "El hotel y el spa son un destino local, con espacios abiertos para trabajar, comer, jugar y regenerarse", dice Jeff Rednour, director general de Equinox Hotels. "Es el espacio perfecto para que los nómadas digitales pasen de las reuniones matutinas, a un tratamiento rápido en el spa o a la hora feliz".

Ahora más que nunca, los espacios deben estar totalmente integrados".

Al centrarse en la relajación, este tipo de espacios encajan a la perfección en las bulliciosas Nueva York y Los Ángeles. Pero la tendencia también se está extendiendo por todo el mundo; Leary afirma que Remedy Place tiene previsto abrir dos o tres locales más al año. Otros espacios similares han abierto fuera de las grandes ciudades, como The Ring, situado en Clearwater (Florida). Además de lo habitual, como café de comercio justo y servicios de imprenta, The Ring ofrece masajista, quiropráctico, yoga y algo llamado "sala de rejuvenecimiento con cápsula de energía".

Aparte de las cápsulas de energía y el drenaje linfático, una cosa está clara: los trabajadores exigen más a sus espacios de trabajo. La pandemia aclaró a muchos lo importante que es la salud mental y física, y que nuestro trabajo no es distinto del resto de nuestras vidas.

"Creo que se encendió una luz importante en todo el mundo", afirma Leary. Desarrolladores y empresarios incluidos.