Una macroperspectiva de la Historia: Reseña del libro Sapiens

Una macroperspectiva de la Historia: Reseña del libro Sapiens

Sapiens, de Yuval Noah Harari, es una extraordinaria obra de no ficción que ilustra la historia de la humanidad desde una perspectiva macro en lugar de narrar acontecimientos históricos discretos, mostrando una tendencia de conexión global constante a lo largo del tiempo. Utilizando un lenguaje humorístico y abundantes pruebas históricas, Harari ofrece a los lectores una estimulante revelación de cómo los humanos florecieron con la lógica y la cooperación.

Harari señala tres puntos de inflexión significativos en la historia de la humanidad: la revolución cognitiva, la revolución agrícola y la revolución científica. Estos acontecimientos fueron testigos de cómo los seres humanos, u homo sapiens, pasaron de ser una especie discreta a los amos dominantes del mundo. El autor propone algunas afirmaciones asombrosas y examina su validez, como "la confianza es el único respaldo de la mayor parte del dinero del mundo" (343) y "el egoísmo es altruismo"(348). Este libro, por tanto, refrescó mi alma e incluso cambió mi perspectiva hacia la historia y nuestro mundo actual. En esta reseña, demostraré cómo la exploración de Sapiens de la historia y la biología, el orden imaginado y la definición de la felicidad me impresionan e inspiran.

En primer lugar, aunque la historia y la biología parezcan dos temas aislados, se entrelazan estrechamente entre sí, lo que ayuda a los antropólogos a comprender mejor el desarrollo del homo sapiens. En la prehistoria, el homo sapiens superó a otras especies humanas, como los neandertales, y acaparó una gran cantidad de recursos naturales. Los antropólogos han propuesto tanto la teoría del mestizaje, según la cual los humanos modernos son descendientes tanto de sapiens como de otras especies humanas, como la teoría del reemplazo, según la cual somos "sapiens puros", para identificar el linaje de los humanos modernos. Sin embargo, los verdaderos orígenes del homo sapiens siguieron siendo controvertidos hasta que los genetistas cartografiaron el genoma neandertal.

Los genetistas recogieron ADN neandertal intacto de los fósiles, realizaron una amplia comparación con el ADN humano moderno y llegaron a la conclusión de que la teoría del mestizaje es correcta en su mayor parte. Además, por magníficos que sean los logros de los sapiens, siguen estando sujetos a la teoría de la evolución de Charles Darwin y limitados por las leyes de la naturaleza. Utilizar una perspectiva evolutiva para ver el progreso general de los sapiens, como resultado, puede explicar cómo se adaptaron a diversos entornos y por qué habitaron lugares con condiciones climáticas extremas como la Antártida y Norteamérica.

Por muy convincentes que sean las pruebas genéticas, estas pruebas evolutivas tienen evidentes limitaciones para explicar plenamente el desarrollo de sapiens. Como indicó Harari, "[la biología evolutiva] juzga todo según los criterios de supervivencia y reproducción, sin tener en cuenta el sufrimiento o la felicidad individual" (104) También hay que tener en cuenta otros factores, además de la ciencia biológica. Aun así, la biotecnología avanzada impulsó el avance de los descubrimientos históricos y ofreció una perspectiva interesante para observar la historia.

El orden imaginado, el producto más importante de la revolución cognitiva, fue una visión asombrosa ofrecida por Harari, y amplió mis horizontes. La aparición de la concepción de ficción, es decir, de ideologías invisibles como los mitos, distinguió a los sapiens de otros animales, permitiendo que personas de diferentes tribus se unieran y "cooperaran con éxito creyendo en mitos comunes" (30), lo que sentó las bases de la civilización humana. Estos mitos incluyen mitologías y leyendas sobre Zeus y Apolo, así como ideas modernas como los derechos humanos, la libertad y la democracia. Aunque estas ideas no son objetos que podamos ver y tocar en nuestra vida cotidiana, su poder para motivar e influir en la humanidad es extraordinario. Miles de creyentes lucharon y se sacrificaron por estas ideas, y a lo largo del libro van surgiendo ejemplos vívidos como la Revolución Americana.

Inconscientemente, el orden imaginado nos ha moldeado. Antes de leer Sapiens, consideraba que viajar a distintos países y disfrutar de cocinas diferentes era un comportamiento común y originado por instintos humanos naturales. Pero después de leer el libro, me di cuenta de que estos comportamientos se basan en un orden imaginario, construido en torno a la idea del consumismo romántico. Este orden imaginario es inquebrantable; como sólo un orden imaginario puede unir a la gente y lograr algo extraordinario, hay que crear un orden imaginario más dominante para abolir o suplantar el orden actual.

El poder del orden imaginario no se detiene aquí. El dinero, incluido todo tipo de moneda utilizada para representar el valor de un objeto, prevaleció porque los seres humanos generalmente confían en su valor. También es un orden imaginario. Al principio, la moneda circula localmente, para facilitar el comercio igualitario entre vecinos. Pero, después de que los sapiens establecieran conexiones entre distintas regiones lejanas, surgió la demanda de una moneda universal que, poco a poco, impulsó la unificación del dinero mundial.

Mientras leía Sapiens, me sentí un poco incómodo por la sensación de estar siendo manipulado por manos invisibles. Esta sensación de incapacidad me abrumó de repente. Sin embargo, tras contemplarlo un momento, me sentí aliviado. Puesto que el orden imaginado es la lógica subyacente de las sociedades humanas y no podemos cambiarlo, ¿por qué no aceptarlo pacíficamente? Deberíamos respetar las leyes de la sociedad y de la historia, y no sólo las de la ciencia natural.

Aunque el título del libro es Breve historia de la humanidad, el autor también habla de filosofía y psicología, incluida la definición de felicidad. Hay una pregunta perenne que nos hacemos los humanos: ¿Eran las personas más felices en el pasado? Uno podría responder: "¡De ninguna manera! La tecnología y los tratamientos médicos han mejorado mucho a lo largo de la historia, haciendo que la vida sea mejor con el paso del tiempo" Sin embargo, estas mejoras objetivas no pueden considerarse el único criterio para medir la felicidad. Más bien deberíamos deliberar sobre el papel de la experiencia subjetiva.

La gente de hoy no disfruta necesariamente de felicidad mental; las enfermedades mentales son moneda corriente. "Más que [depender únicamente de la condición materialista]", argumenta el autor, "[la felicidad] depende de la correlación entre las condiciones objetivas y las expectativas subjetivas" Estoy totalmente de acuerdo con este punto de vista. Al igual que el efecto de disminución de la utilidad marginal en microeconomía, cada vez nos resulta más difícil obtener satisfacción a medida que adquirimos más riqueza física. La única forma de evitar este ciclo interminable es minimizar nuestras expectativas y aceptar y valorar nuestra vida cotidiana. Buda desarrolló aún más esta idea y exhortó a la gente a dejar de evitar las emociones negativas para mantener las positivas. Creo firmemente que sólo la disección serena de nuestros sentimientos como un inspector imparcial, sin juicios ni emociones adicionales, puede proporcionar a los seres humanos la mayor felicidad. La visión del autor sobre esta cuestión filosófica fundamental resonó en mí, profundizando mi comprensión y reformando mi actitud hacia el mundo y mi vida.

Tras analizar una amplia gama de temas y largos periodos de la historia, es impresionante que Harari mantuviera una lógica clara a lo largo de Sapiens. En general, este libro no sólo ha ampliado mis conocimientos sobre la historia global, sino que también me ha ofrecido una inspiración filosófica inestimable. Demuestra que la historia no es una simple acumulación de detalles. Más bien, Harari modela un método de pensamiento racional que nos permite absorber experiencias del pasado para construir un futuro más prometedor.

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